La Historia detrás de “Cross-Eyed Mary”: La Anécdota Vocal de Bruce Dickinson en Iron Maiden

En el mundo del rock, Iron Maiden es una banda que no solo ha dejado una marca imborrable en la historia del género, sino que también ha destacado por su ingeniosa tradición de incluir versiones de otras bandas en las caras “B” de sus singles. Uno de los ejemplos más notables de esta práctica se encuentra en el icónico single “The Trooper”. Mientras la canción principal se lleva la atención merecida, es la cara “B”, “Cross-Eyed Mary”, la que esconde una fascinante anécdota que involucra al carismático vocalista de la banda, Bruce Dickinson.

“Cross-Eyed Mary”, originalmente una pista de Jethro Tull, fue la elección de Iron Maiden para complementar su single “The Trooper”. Sin embargo, la historia detrás de la grabación de esta versión revela una situación memorable en el estudio. Como es habitual, la parte instrumental fue grabada primero, dejando a Dickinson la tarea de agregar sus distintivas voces a la canción.


Pero aquí es donde la historia toma un giro interesante. Cuando Bruce Dickinson ingresó al estudio para registrar sus partes vocales, se encontró con una sorpresa que desafiaría sus habilidades vocales. Sus compañeros de banda habían tomado la decisión de grabar la pista una octava más alta de lo que Dickinson estaba acostumbrado a cantar. Esta elección llevó las voces a un rango vocal más exigente y desafiante, haciendo que la interpretación de la canción resultara una tarea considerablemente más difícil para el vocalista.


Steve Harris, el legendario bajista y fundador de Iron Maiden, le ofreció a Dickinson la opción de volver a grabar las partes vocales en un rango más cómodo. Sin embargo, Bruce sorprendió a todos al rechazar la oferta y, con su característico sentido del humor y confianza, declaró que “echaría huevos al asunto”. Esta expresión ilustra su determinación de enfrentar el desafío y cumplir con las expectativas, incluso si eso significaba forzar sus habilidades vocales al máximo.

La elección de no grabar nuevamente las partes vocales resalta la ética de trabajo y la pasión de Bruce Dickinson por su arte. La canción resultante muestra la valentía y la dedicación del vocalista por igualar el rango vocal exigente de Ian Anderson, el vocalista original de Jethro Tull. Es por eso que los fans pueden notar a Dickinson forzando su voz en este clásico, y este esfuerzo añade una capa adicional de autenticidad y emoción a la interpretación.

En última instancia, la anécdota de “Cross-Eyed Mary” revela la profundidad del compromiso artístico y la camaradería dentro de Iron Maiden. La decisión de Bruce Dickinson de asumir el reto vocal demuestra su dedicación y su deseo de honrar las influencias musicales mientras imprime su propio estilo en la canción. Este episodio sigue siendo un testimonio del espíritu inquebrantable que ha convertido a Iron Maiden en una de las bandas más queridas y respetadas en la historia del rock.

Escrito por: Rulo Ham el 12-08-2023